La enfermedad coronaria supone un aporte insuficiente de oxígeno y nutrientes a las células del músculo corazón. Su causa fundamental es siempre la oclusión parcial o completa, transitoria o definitiva, brusca o progresiva, de la luz del vaso coronario, dpendiendo del grado de Aterosclerosis, que se inicia en edad juvenil. Es por ello que como instrumento preventivo, los cardiólogos estamos recomendando a la población sana la realización de chequeos cardiológicvos, no a los 40 años, sino antes incluso de llegar a esa edad, bien como simple prevención, bien aprovechando cualquier enfermedad intercurrente.
Su mayor incidencia, sin embargo, se produce en los grupos poblacionales cuya edad es superior a los 65 años. En 1990, el índice de población geriátrica o mayor de 65 años se situaba entorno al 4%. Ese índice ha ido paulatinamente aumentando hasta situarse en el 17% en el año 2000, de lo que, a falta de estadísticas más recientes que en la actualidad debe rondar una cifra superior al 20%. De otro lado, y por la confluencia de diversos facgtores, la esperanza de vida ha ido aumentando progresivamente: desde los 47 años en que se situaba a comienzos de siglo, en 1986 la esperanza de vida media para los varones era de 71 años y para las mujeres de 789 años. En la actualidad la vida media delos varones ronda los 80 años y en las mujeres los 90 años.
Por lo que se refiere a la incidencia de las enfermedades cardiovasculares en este grupo poblacional, más del 40% de la población ronda los 65 años se ve afectada por las mismas en mayor o menor medidad, índice que aumenta hasta el 50% para edades entorno a los 70 años, y al 60% cuando superan los 80 años.
De este conjunto de cifras y datos estadísticos, se ha de concluir; como lo hace unánimemente el conjunto de la doctrina científica, que la enfermedad coronaria es la enfermedad más frecuente en el mayor y la principal causa de morbilidad, tanto en la mujer como en el hombre. se sabe que en los mayores la enfermedad coronaria se presenta con unas características propias y singulares: infartos indoloros (13%), isquemia coronaria silente, pluripatologia, que son más sensibles a la anemia, hipoxia, arritmias, hipo e hipertiroidismo, etc.
Es, pues, de suma importancia el estudio de la enfermedad coronaria en este grupo poblacional. Y ello, como venimos apuntando, se debe a múltiples razones.